viernes, 28 de junio de 2013

Esos sueños que son vapor de alcantarilla.

Curtido caminante que vaga vasallaje,

rico en mente y pobre en traje.

Sin descanso desespera en espera de un largo sueño.

Muero en vida, vivo en sueños.

Las campanas retumban los oídos.

Despeguen veloces hasta la meta muerta.

Enhorabuena, han conseguido ser viento después de tormenta.

Y el duende marcha en busca de miel al panal penal.

Zumbante zumo encima de la encina hayada en la cima.

Conquistando nebulosas fantasiosas

ya dijeron:

En la guerra, como en el amor, para acabar es necesario verse de cerca.

¡Bien dicho Napoleón!

Zombie vagante que divaga divulgando murmullos.

Murmullos sordos que pocos escuchan y mueren con él.

Buscando encontrar esperanza en su vida.

Pierde tiempo, salud y se pudre si salida.

Esos sueños de crío que son vapor de alcantarilla.

domingo, 16 de junio de 2013

Quiero.

Quiero que no duermas, que no comas ni que bebas.

Quiero que te mueras de ganas por estar a mi lado.

Quiero que sufras en soledad, con gemidos de añoranza, el que no esté ahí.

Quiero que enloquezcas y hagas cada día una locura.

Quiero enredarte en mis brazos, y que me acaricies con tus labios.

Quiero que olvidemos todo y recordemos solo ese momento.

Quiero odiarte, porque amarte ya más no puedo.

Sufro en mis adentros que no estás conmigo.

Sufro que no puedo amarte, y sólo puedo verte.

¿Y de qué sirve amar, si no puedes rozar la suave piel de ella?

¿De qué sirve si no pruebas el sabor de sus labios, ni el olor de su cuello?

Quiero acariciarte tu pelo, rodear tu cintura y abrazarte mientras te beso.

Quiero mirar la Luna para encontrarle el parecido a ts ojos.

Quiero sólo tiempo, tiempo para aguardarte y no perderte.

Yo no quiero nada, nada más que contigo.

Annel.

No te he visto en mi vida, y te conozco de siempre.

No te he besado y quiero repetir el sabor de tus labios.


Miro la luna y veo que por ella me miras rodeada entre estrellas para hacerte aún más bella.


Pero me vuelvo loco, loco por que cuando camino y sopla el viento,


creo que me susurras y... que tan rico lo siento.

jueves, 13 de junio de 2013

Los ojos de la vida.

En las pupilas del pupilo se ve al cocodrilo del Nilo, pero esta vez las lágrimas no mienten en el bestial enfurecido.

Parece que se oye, pero no llega la calma. Es que el viento con un azote se la lleva a ritmo de samba, burlona entre sus labios, pero doliente en mi pozo humano.

Es esa mirada que parece caerse, pero que al final llega flotando hasta mí, y se desvanece en mi ser.

Como esa mirada de enredadera, que quiere recorrerte, abrazarte y no soltarte nunca con todas sus raíces y ramas secas pero fuertes.

Creí haber encontrado refugio entre tus brazos, pero fue ilusión del sueño de una noche.

Me pesa la vida, y no por años, de estar buscando cobijo entre besos y brazos.

Hoy mi guitarra que nunca toqué toca sola, compareciente de mí y de mi ser. Existencia existencial, tal vez vivir sea casual.

En un cartel veo anunciado el futuro de mi próximo pasado, no sé que hacer, no sé dónde dirigirme, al fin y al cabo solo me queda extinguirme.

Como flor en invierno, como invierno en primavera, tan juntos y tan separados, y a la vez sin darnos cuenta.

Pero las nubes de roca me chivan al alma lanzándome truenos y haciéndome de ellos dueños. ¡Basta ya malhechores inmorales que sólo buscan lo ruin!

Y mientras, Caronte se siente carente de tiempo. Los muertos sientan, pero no hay asientos.

En noche.

Siento mis sentidos obscenos de pesamientos.

Siento soledad, y no me lleno conmigo ni con mi ego.


La música me retumba a ritmo de pulsación sistólica.


Y el eco que lo produce es mágico en su métrica sintomática.


El médico me ha recetado jarabe de palo.


Cogeré mi estaca para una dosis de vampiros.


Será grata compañía si la gata no mata.


¡Fuera demonios infernales!


Y entre comida y estómago vacío se halla profundo azul océano.


Es que esto de pensar escribir escribirte y pensarte me está volviendo loco.

martes, 11 de junio de 2013

Cazador borracho de amor.

Sólo logro verte entre tinieblas de nieblas de mi mente al cerrar los ojos.

Cuando intento acariciarte te atravieso con mi mano, y un puñal me atraviesa el corazón.

Me elevo al oír tu voz. Creyendo que era pájaro pero me sustentabas con tus alas.

La espera desespera ingenua al ingeniero que repara tu alma.

Y en eslabones carcomidos va buscándote en cadena.

Pasiones ilusas y malheridas que a fuego desenfrena.
Me resulta exfoliante patinar con mis dedos en tu vientre y al ver el engranaje de esta fantástica máquina que expulsa vapor en forma de gemidos.

¿Pero exfoliante el qué? El imaginar hacerlo, el hacerlo o tal vez tu vientre y el poder verlo.

Eres ron en mí. Subes a mi cabeza, de forma dulce pero seca.

Si te toco eres tan pegajosa que no puedo separarme de tí.

Y calientas mis noches frías y solitarias hasta el punto de emborracharme de locura al beber de ti.

¡Quiero perderme en el remolino de mar del fondo de una piscina!

Cálculos celulares calcan curvas coloridas claras extinguidas.

Donde retoños de ti en forma de pedazos fotográficos vagan por mi mente.

Sístoles y diástoles te buscan en llamaradas llamadas.

¿Cómo puede el cazador cazar si la leona le ha comido?

Aún te amo.

Efímeros recuerdos féminos con semblante a las palabras recuerdan tu llegada.

Sin descanso desespero esperando un largo sueño.


OH, y atenuante Atenea se desviste meridional.


Como mordisco a manzana, con dulzura, pero como si fuese bestia animal.


Consuela al desconsolado, estar siempre a tu lado.


Y aun que a veces, insatisfecho, agradezco agradecer mecer tu cuerpo en nuestro lecho.


Y hoy que no estás, camino por las estrellas, como no te han visto, se sienten más bellas... 


¡INGENUAS!

Que sepa cualquiera que si ya no me quieres es porque me quisistes demasiado, y mientras yo bailaba con dedos, tú me protegías con tus manos.


Que los sapos han inventado, que las brujas hechizado, la farola del mundo se ha roto, y un anciano la está cambiando.


Los perros lamen mis huesos notables, mientras veo como bailas con la muerte entre un compás de sangre y sables.


Espero y quiero esperarte, que mientras hay lombrices en mi alma y monedas en mis ojos, aún te amo entre sollozos.

lunes, 10 de junio de 2013

Blanca maría.

Como un cogollo de maría. Seca, fresca y limpia.

Que me coloca entre el extasis y el climax.

Que me expande y hace que quiera más.

Verde maría, pero más fría porque ha nevado sobre ella.

Blanca maría me olvida me embriaga, la veo bella.

Y la riego todos los días y más grande sé que es.

Ella se siente chica, pero no sabe que es al revés.

Me atrapa como una enredadera y me asfixia y ahoga.

Pero no me separo de ella.

Blanca maría para fumar en primavera.

Noto que se me acaba, la fumo y se esfuma.

Sólo quedan cenizas, ni el humo me arropa ahora.

Que ya no tengo planta. Blanca maría no es mía.

Todo lo que me jode de tí.

Me jode ser distinto y no poder ser igual.
Me jode la indiferencia de esta puta realidad.

Me jode ser opción y no ser la mejor a escoger.
Me jodeque elijas, no ser yo y tenerlo que ver.

Me jode ser tu payaso y no tu humorista.
Me jode tener que ser un tonto más de tu lista.

Me jode pensar tanto si tanto me quieres.
Me jode que hables. Con respirar me hieres.

Me jode no llegar a ser ni sujeta velas.
Soy el mechero que las enciende y con el que quemas tus viejas telas.

Me jode NO cuando yo SI y SI cuando yo NO. 
La indecisión de tu palabra y todo lo que te acontece.
Me jode vivir porque pasa el tiempo, y mi amor perdura y crece.